En sus inicios más primitivos el deporte estuvo relacionado con la supervivencia humana: la necesidad del hombre por buscar su propio alimento por medio de la caza, correr para huir de sus depredadores, etc. A lo largo de los siglos ha evolucionado organizándose en diversas disciplinas reglamentadas. 

En la actualidad el deporte es una herramienta para el bienestar mental, físico, psicológico y social de cada uno de los individuos que deseen practicarlo. Según la organización mundial de la salud el realizar alguna actividad física es fundamental para prevenir cardiopatías, diabetes, reducir síntomas depresivos, deterioro cognitivo, mejorar  la salud y potenciar el funcionamiento del cerebro. 

Sin embargo el deporte va más allá de generar un bienestar físico, el deporte logra escalar a escenarios de transformación social que permiten especialmente a los niños desarrollar habilidades de comunicación social, valores, hábitos, aumentar su autoestima, todo lo anterior desemboca en una transformación del ser a través de la práctica deportiva.

Diversas fundaciones y academias deportivas han integrado el componente social, con el fin de ir más allá de lo competitivo, enfocándose en una formación integral. Un claro ejemplo es la fundación barcelona quienes utilizan el deporte, el juego y la actividad física como herramientas de integración social para mejorar la vida de los niños y jóvenes que se encuentran en contextos vulnerables. buscando fomentar el esfuerzo, el respeto, el trabajo en equipo, la humildad y la ambición, entendidos desde la cultura de la cooperación para que sean positivos a nivel individual y también colectivo. Su impacto los ha llevado a 54 países y beneficiado a 800.000 niños. 

La fundación Amor fiel quienes se encargan de resaltar en valor de las personas para una vida digna basada en el amor, y trabajan con una población base  en el barrio la bendición de Dios en la ciudad de barranquilla. Un barrio en condiciones vulnerables, de desplazamiento, donde los niños se ven expuestos a vivir entre bandas criminales, expendios de droga y consumo de las mismas. Pero así mismo con muchas personas con sueños de sacar a su familia adelante y anteponerse a la adversidad de su contexto. 

Desde hace 5 meses establecieron una alianza con la academia de fútbol Psicogol methodology, con el fin de formar y proyectar a niños participantes de la fundación amor fiel a  ser profesionales íntegros. y tener la oportunidad de sobreponerse a la realidad de su barrio. 

Son 7 niños de momento, quienes se están beneficiando con las becas otorgadas por parte de la academia. 

A lo largo de estos meses, la fundación ha hecho un acompañamiento en conjunto con la academia,  con el fin de formar no solo desde lo deportivo, también en valores que le permitan a cada niño crecer desde lo personal. Pese al poco tiempo que pueda parecer, para generar un impacto en los niños, se ha evidenciado una serie de cambios en cada una de sus conductas, no solo en los entrenamientos si no en sus colegios y hogares. 

Para ello, se entrevistaron a su madres quienes comentaron lo siguiente referente a los cambios de sus hijos:

 “Bueno en el colegio se ha vuelto más responsable, hasta él mismo lava el uniforme, lo tiene limpiecito” (Madre de niño becado)

Dentro de las conclusiones establecidas en las entrevistas se destacan las siguientes:    

• Las madres resaltan el proceso que llevan su hijos con la academia y la calidad humana de cada uno de los entrenadores.

• Los niños se encuentran más motivados al momento de realizar acciones responsables en el hogar, mayor compromiso en el colegio. Esto a representado un cambio en el comportamiento de cada uno de ellos: Lavan sus uniformes, están pendientes de sus tareas, se preocupan por su puntualidad,

• Los niños y las madres han aumentado su comunicación en torno a sus vivencias en partidos y entrenamientos.

El deporte es una herramienta poderosa para construir sueños, personas y alcanzar metas. Muchas veces es una salida para escapar de contextos sociales desfavorables, por eso hay que seguir apostando a que nuestros niños y jóvenes vivan una experiencia deportiva, pero no enfocada en llenar la estantería de medallas. Más bien en una formación desde el ser que permita desarrollar esas habilidades para la vida,  que a futuro permita tener profesionales íntegros en cualquier rama. A partir de esa base las medallas llegarán como consecuencia del trabajo, la disciplina, la constancia y perseverancia adquirida en el proceso.